lunes, 27 de junio de 2011

Automatizo los engranajes

El viento que mece los toldos, hace lo mismo con la cuna; hizo lo mismo con la mía.
Colores sobre el papel, dominando el rosa. No se posicionan de una forma específica.
La maquina de escribir está inquieta como mis neuronas, y no deja de emitir ese ruidito tan característico del rodillo que llega a su fin.
Requiem for a dream, drogas y burbujas dilatándose.
Una lata de Coca-Cola que quita la sed con solo mirarla. Frescor gracias al sudor que emana.
Blanco y negro. Tú eres el Ying y yo soy el Yang. Juntos, la explosión incolora.
Una poderosa secuoya a través de la cual pasa un tren de vapor.
Salir de la madera y el cristal. Escapar a tu nidito de amor y que me achuches.
Tus dientes son igualitos a los del gato invisible que me recordaba a la luna fragmentada.
Dolor que quema, pero por el que no sufro. Me molesta, simplemente eso.
Erupción incómoda sobre la carne rojiza y suave. Hoy no hay beso, tome o no chicle.
Un vestido estampado, con vuelo.
Quiero volar hacia tu puerta y cantarte al oído.
No siempre me gusta el cine, es más, creo que me repugna. Azuloscurocasinegro.

Hasta luego. Puntos suspensivos.

Daniel Carrascosa Costa

1 comentario:

  1. Azuloscurocasinegro.
    Me gusta esa película.

    Hola. Punto suspensivos.

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